Así inicia mi colaboración de hoy viernes 8 de julio, con esta frase publicada en diversos medios de comunicación, la noticia más comentada a nivel nacional. LOS MAESTROS HICIERON TRAMPA EN EL EXAMEN. Para quién no esté enterado, los días tres y cuatro de julio se hicieron exámenes a los docentes que se inscribieron a la Promoción Horizontal, ¿Qué implica realizar este examen? Obtener un aumento al salario del maestro. Realizar esta evaluación fue un viacrucis, la página que el gobierno puso a disposición de los docentes fue un verdadero dolor de cabeza para muchos maestros que trataron de inscribirse, y no por someterse a un examen solo por gusto o por hobby, quienes participamos lo hicimos con la firme intención de obtener un mejor ingreso, demostrando que somos capaces, que tenemos calidad, que estar al frente en un aula con más de treinta y cinco o cuarenta alumnos, no es fácil, en este lapso, que la pandemia obligó a trasladar las clases a las casas, ningún maestro se hizo a un lado, diez, once, doce de la noche, recibiendo trabajos de los niños, mensajes de los padres de familia, si la casa familiar se convirtió en el salón de clases, la casa del docente fue toda la escuela, el ciber, el confesionario, la biblioteca, la mesa llena de libros, la cama, el patio, se hizo uso de los instrumentos que poseía el docente, se compraron computadoras, copiadoras, hojas, los celulares sonando desde las seis de la mañana, hasta la media noche, repletos de información para atender a los padres y a los alumnos, con la premisa de no dejar a nadie atrás y nadie afuera de la educación como lo dice la Nueva Escuela Mexicana. Si tan solo pudiésemos escuchar las voces de esos docentes que se inscribieron al examen de admisión, promoción vertical y horizontal y, que para empezar la página del USICAMM presentó demasiadas fallas, inconsistencias, errores en los registros, además, entrar a la página, subir documentos, esperar a obtener respuestas, leer toda la bibliografía, estudiar, realizar círculos de estudio sin descuidar el trabajo con los alumnos, fue parte de este deseo de obtener ese reconocimiento al trabajo docente, que no es ninguna dádiva, es ganado a pulso. En el último Consejo Técnico Escolar del mes de junio, a Secretaria de Educación, en su discurso a los docentes se refirió a que en el período de pandemia, se pagó el salario a los docentes como un ordenamiento del Presidente de la República, así es, pero no fue un regalo nuestro pago, cada docente se ganó a pulso ese ingreso, se habló mucho de la revalorización del magisterio “Se respeta la dignidad de las maestras y los maestros, valoramos mucho el valor de lo que hacen” palabras del primer mandatario y solo se queda en frases que no dejan huella. Un periodista de una televisora dijo: maestros copiones, que les rompan el examen, tache. No sé qué tan informado esté del proceso, pero habla solo desde su escritorio, este señor no sabe todo lo que tuvimos que hacer, con una carga administrativa que implica más trabajo de lo que humanamente puede hacer un ser humano, es más fácil insultar antes que informarse. Hubo docentes que no pudieron ingresar por errores de la página del USSICAMM, otros más que al realizar el examen, la página se cerró y no hubo forma de accesar y continuar con las preguntas, quedaron fuera del ingreso al servicio docente. Mención aparte la promoción vertical, diseñada para promocionarse a directores y supervisores, a quienes participaron se dice que copiaron porque encontraron respuestas idénticas entre los profesores que participaron en las evaluaciones sobre todo en los instrumentos de valoración, apreciación de Conocimientos y aptitudes, de acuerdo a los algoritmos de reconocimiento facial ,se identificó a setenta y nueve participantes que incurrieron en conductas atípicas, además que en el cuestionario de habilidades directivas que constaba de cien preguntas se encontraron las mismas respuestas correctas e incorrectas de muchos maestros, de ahí que se les tache de copiones, corruptos y deshonestos. En mi caso, estudié, tomé tiempo del tiempo, dormí poco, saqué notas, busqué temas de estudio para la promoción horizontal, se nos pidió mantener la vista fija en la computadora, no mover los labios, ni parpadear ya que podría deducirse que se presentaba una conducta atípica y podría cancelarse el examen, tuve que realizar examen fuera de mi casa, en un lugar apartado, para que no interrumpiera el sonido del timbre, el grito del tamalero, la música del vecino, sin embargo, al tratar de ingresar hubo fallas, la pantalla en blanco, no se podía ingresar, hubo compañeros que ya habían resuelto gran parte del examen, y la página se quedó en blanco y no pudieron continuar, perdiendo así la oportunidad de mejorar su ingreso, una computadora, por medio de un algoritmo, decidió quien era culpable y lo peor, es que el USICAMM ha permitido que se denigre a los docentes con estas etiquetas, cuando el único culpable fue él mismo, le quedó grande esta evaluación de los docentes, por ello, es fácil decir que son los culpables por copiar. Es cierto, se estuvieron compartiendo videos, respuestas, que no puedo decir que los compañeros los compraron o hicieron uso de ellos, esto depende de la ética, el profesionalismo y la educación de cada docente, sin embargo, si ésto ocurrió, quien filtró esa información, tuvo que ser personal del mismo sistema. Antes de emitir esos juicios hacia los docentes, primero debe existir una información, ¿Dónde están los sindicatos que religiosamente reciben una cuota? Están en silencio, no son capaces de alzar la voz por aquellos a quienes se supone que representan, ¿Dónde está la revalorización del magisterio? Si los medios de comunicación tienen la nota ¡Maestros copiones! ¡Qué vergüenza! Educo a mis alumnos para que sean ciudadanos honestos, firmes en sus convicciones, que basen su educación en la integridad en el respeto, ¿Qué pensarán cuando lean estas afirmaciones? ¿Qué pensarán los padres de familia? Sobre todo esos, que nunca enviaron un trabajo de sus hijos y que tuvimos que pasarlos con un seis porque está prohibido reprobar, ahí sí podría decir que fuimos corruptos por seguir las indicaciones de un sistema que parece importarle nada la educación. Maestra Lorena Reséndiz
