“No hay duda de que la siguiente generación de tecnología móvil abrirá un sinfín de posibilidades para construir sociedades digitales, hiperconectadas y prósperas. Ante esta realidad, no basta con repetir fórmulas pasadas: la innovación exige disrupción y debe venir acompañada de la diversidad.
En el proceso de creación de nuevas tecnologías, la diversidad evita la reproducción de sesgos prexistentes. Las mujeres en este sector aportan valor, nuevas perspectivas y una forma diferente de abordar un problema. Por estas razones, incluirlas no solo es una cuestión ética, sino una oportunidad que tienen las industrias de mejorar y adaptarse rápidamente a las exigencias del futuro digital.
¿Dónde están, entonces, las mujeres en la tecnología?, ¿Dónde podemos encontrarlas para sumar su talento a nuestros proyectos? El panorama, me temo, es poco alentador. A pesar de años de esfuerzo y progreso en temas de igualdad, la presencia femenina en la fuerza laboral de las áreas tecnológicas sigue siendo limitada en Latinoamérica, ya que solo representa entre 21% y 40% del total de las posiciones por país en esta región.
Y antes siquiera de pensar en la situación laboral, partamos desde la raíz del problema: a los 15 años, 10 veces menos mujeres presentan interés en convertirse en profesionales de las Tecnologías de la Información y la Comunicación en comparación con los hombres.
Es crucial comenzar a romper con estereotipos que llevan a las niñas y jóvenes a autoexcluirse de estas profesiones tecnológicas que, además, son las que tendrán mayor impacto para la humanidad. Incrementar su exposición a modelos femeninos a seguir es un buen comienzo, porque poder verse reflejadas en un sector que hoy sigue dominado por hombres, donde solo el 23% de las organizaciones cuenta con al menos una mujer dentro del equipo de fundador y 27% de las Direcciones de Tecnología (CTO) son ocupadas por mujeres, hará una gran diferencia para que estas jóvenes ensanchen el camino que han abierto otras.
Tenemos que empezar hoy a impulsar el conocimiento y potencial de la siguiente generación de mujeres STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés), la cual podrá revertir la falta de talento femenino sobre todo en campos que requieren habilidades técnicas disruptivas como Cloud Computing (donde las mujeres representan el 14% de la fuerza laboral a nivel global), ingeniería (20%) y datos e inteligencia artificial (32%)
Tenemos también que empujar por un cambio cultural que, por desgracia, prevalece en nuestras sociedades sobre lo que una mujer puede o no hacer. Por ejemplo, en el ecosistema de emprendimiento tecnológico aún se siguen cuestionando las capacidades de las mujeres para crear una empresa solo por su género: 40% de las emprendedoras manifiestan haber sido víctima de algún tipo de discriminación en este sector, de las cuales el 97% de los casos corresponde a discriminación de género.
Sobre este último punto es que iniciativas como eNovadoras, que impulsa emprendimientos tecnológicos liderados por mujeres, cobran tanto valor.
eNovadoras tiene como objetivo impulsar la participación de las mujeres y cerrar la brecha de género en el ecosistema emprendedor en México, brindándoles capacitación, acceso a una red de mujeres líderes y capital semilla para llevar sus negocios al siguiente nivel.
Según datos de Endeavor Intelligence, solo el 25% del total de emprendimientos en tecnología existentes en Latinoamérica son dirigidos por mujeres. Estas firmas son, en promedio, tres veces más pequeñas que las dirigidas por hombres. Es hora de cambiar, adaptarnos y prepararnos para una nueva realidad en el que todas las personas convivamos en igualdad, gozando de los beneficios de la tecnología.
Es hora de abrir paso a las mujeres en la tecnología que solo sumarán a esta diversidad que nos hará más fuertes y resilientes. Es hora de cambiar el juego.
Escribe Mayra A. Rivera Vicepresidenta y Directora General de Cadena de Suministro y Logística en AT&T México