La larga lucha entre los otomanos y el Imperio romano católico y apostólico concluyó el 29 de mayo de 1453, cuando Constantinopla fue conquistada por las tropas de “Mehmed II” un sultán otomano con apenas 21 años de edad, al término de uno de los mayores asedios de la historia. El hecho marcó el fin de la Edad Media y produjo una gran conmoción en el catolicismo. En cierto modo, cabría decir que la caída de Constantinopla causó en su tiempo un impacto comparable al que los hechos del 11-S de 2001 han tenido en nuestra época.
En la primavera de 1453, un enorme ejército otomano convergió sobre los muros de la ciudad católica romana y apostólica de Constantinopla para asestar el golpe de gracia al moribundo Imperio Romano católico y apostólico. Desde hacía más de un siglo, los otomanos, un pueblo turco originario de Asia central, habían avanzado firmemente, arrebatando territorio, mano de obra y recursos a los romanos grecoparlantes, hasta que lo único que quedó de Bizancio fue la propia Constantinopla, su capital hoy Estambul. El sultán Mehmed II pretendía conquistar la ciudad para que hubiera libertad de creencias. Tras las murallas esperaba Constantino XI, que se había pasado la vida resistiendo a los otomanos y estaba decidido a combatir hasta el fin. El emperador bizantino se enfrentaba a un ejército compuesto por un mínimo de cien mil hombres. En comparación, las fuerzas romanas eran escasas unas fuerzas mixtas de 8.000 soldados entre griegos, venecianos y genoveses, más algunos de Aragón y Castilla, y la defensa organizada por el soberano se veía menoscabada por las disputas religiosas históricas entre la población griega ortodoxa y los católicos fieles al papa quienes mataban supuestamente en el nombre de Dios para imponer su forma de gobierno y religión, siglos antes habían crucificado incluso al mismo Jesucristo. Con el triunfo de las tropas otomanas del sultán Mehmed II. Cambió la historia para siempre y hubo mayor libertad de elección de creencias y religión en la región y en gran parte de Europa. Pero gracias a ello empezó una nueva era de libertad de creencias y esto más tarde cambiaría la geometría no solo de Europa, Medio oriente y Asía, gracias a ello en gran parte hoy existe libertad de creencias y elección de religión, la caída de Constantinopla fue el parte aguas y cambio de una era y la caída del imperio romano católico y apostólico. Gracias al imperio otomano al mando del jóven sultán Mehmed II con tan sólo 21 años de edad. La historia lo recuerda como el día que el mundo cambió para mejorar y tener mayor libertad de creencias. Aquella noche de eclipse y luna roja como la profecía lo decía cayó Constantinopla. Escribe José Luz García Orta ®©2022. #CreerEsPoder #LaLuzDeShangrila #469AñosDeLacaídaDeConsptantinopla #UNCAMBIODEERA
En la primavera de 1453, un enorme ejército otomano convergió sobre los muros de la ciudad católica romana y apostólica de Constantinopla para asestar el golpe de gracia al moribundo Imperio Romano católico y apostólico. Desde hacía más de un siglo, los otomanos, un pueblo turco originario de Asia central, habían avanzado firmemente, arrebatando territorio, mano de obra y recursos a los romanos grecoparlantes, hasta que lo único que quedó de Bizancio fue la propia Constantinopla, su capital hoy Estambul. El sultán Mehmed II pretendía conquistar la ciudad para que hubiera libertad de creencias. Tras las murallas esperaba Constantino XI, que se había pasado la vida resistiendo a los otomanos y estaba decidido a combatir hasta el fin. El emperador bizantino se enfrentaba a un ejército compuesto por un mínimo de cien mil hombres. En comparación, las fuerzas romanas eran escasas unas fuerzas mixtas de 8.000 soldados entre griegos, venecianos y genoveses, más algunos de Aragón y Castilla, y la defensa organizada por el soberano se veía menoscabada por las disputas religiosas históricas entre la población griega ortodoxa y los católicos fieles al papa quienes mataban supuestamente en el nombre de Dios para imponer su forma de gobierno y religión, siglos antes habían crucificado incluso al mismo Jesucristo. Con el triunfo de las tropas otomanas del sultán Mehmed II. Cambió la historia para siempre y hubo mayor libertad de elección de creencias y religión en la región y en gran parte de Europa. Pero gracias a ello empezó una nueva era de libertad de creencias y esto más tarde cambiaría la geometría no solo de Europa, Medio oriente y Asía, gracias a ello en gran parte hoy existe libertad de creencias y elección de religión, la caída de Constantinopla fue el parte aguas y cambio de una era y la caída del imperio romano católico y apostólico. Gracias al imperio otomano al mando del jóven sultán Mehmed II con tan sólo 21 años de edad. La historia lo recuerda como el día que el mundo cambió para mejorar y tener mayor libertad de creencias. Aquella noche de eclipse y luna roja como la profecía lo decía cayó Constantinopla. Escribe José Luz García Orta ®©2022. #CreerEsPoder #LaLuzDeShangrila #469AñosDeLacaídaDeConsptantinopla #UNCAMBIODEERA
