Buenos días a los estimados y estimables lectoras y lectores de este espacio. Ganas tenía de venir a informarles sobre lo importante que serán los días por venir en la vida de dos mujeres que dieron en el error vital de emparentar políticamente con quien ahora es el Fiscal General de la República; sin embargo, ¿quién iba a saberlo por aquellos años? Si una conociera el destino que le espera, de maje se metería en tramas sin solución. Y así les sucedió a las mujeres Laura Morán y Aljendra Cuevas Morán, hija de la primera. Laura Morán fue la compañera sentimental de Federico Gertz Manero, hermano del ahora presunto abusivo fiscal. Ojo, mucho ojo, como dice mi abuelita: uno sí termina casándose con la familia de la esposa o del marido, por eso hay que fijarse en la historia de la familia. Y en una de éstas ahora repúblicas tropicales, la persona puede hasta terminar unida con el ensueño del presidente de la república en turno, si éste se encapricha en apoyar a un fiscal que lejos de ser probo, resulta en un abusador colérico y vengativo. Pero vamos, le cuento la historia de este nuevo drama en la vida de Alejandro Gertz. Fue a principios de agosto del 2015, hace ya 6 años y 7 meses, que el hermano del fiscal de la república, Federico, cayó muy enfermo. En varias entrevistas ha dicho que no veía a su hermano porque su familia política “se lo prohibía” (ajá) y que fue de buenas a primeras en que aparecieron en su vida para avisarle que su hermano se estaba muriendo y que a ver qué hacía con él (ajá). Debo aclarar que la actualmente la señora Laura Morán cuenta con 95 años, menos 7, debió tener en ese entonces 88, los suficientes para no poder ni con su esqueleto, mucho menos con tener la fuerza física para mover y realizar curaciones a un señor que llevaba tiempo postrado en cama. Pero ¿qué cree?, estimado lector: Alejandro de inmediato fue a ver a su hermano y ha informado que a la par lo trasladó a un hospital para que lo asistieran. Lo segundo que hizo fue contratar al abogado Coello Trejo, me imagino que se refiere a don Javier, mejor conocido como el “Fiscal de Hierro” quien por cierto acaba de publicar sus memorias, muy buenas. En tercer lugar, congeló las cuentas de su hermano, lo que traduce como radiografía el sentimiento y pensares de Gertz Manero. Vea usted: de no poder ver al hermano lo saca en un tris de su casa. Si se hubiera preocupado por la salud de Federico, hubiera puesto los medios para cuidarlo y asistir a su anciana cuñada; si no fuera a vengarse, no contrata a Coello Trejo y si no fuera ambicioso, tampoco congela las cuentas. El camino a la venganza estaba trazado desde entonces. Para colmo inventó un delito, lo que extraña de Coello Trejo, si es que él lo ayudó.
Como la causa no iba a prosperar “por homicidio por omisión”, ni lo hizo, la enfiló contra la hija de la señora Morán, Alejandra Cuevas, acusándola de “garante accesoria”, lo que viene a ser un “invertebrado gaseoso” como me enseñó mi maestro de Derecho Romano en la tres veces H Escuela Libre de Derecho. O sea, sin ley no hay delito, ¡zaz!, así, lisa y llanamente.
Pues con esa pifia ha tenido encerrada a Alejandra en Santa Martha Acatitla. De nada sirvió la primera suspensión; en cuanto llegó a la Fiscalía como director reabrió el caso con la ayuda de sus influencias en la 4T, hasta que se filtraron los audios en los que Gertz se jacta de contar con los votos necesarios para que la hijastra de su difunto hermano se pase no sé cuántos años encerrada. ¿Desde cuándo una hija de matrimonio anterior es responsable de atender al 2o esposo de su madre? Los votos, para más escándalo, serían de los jueces de la Suprema Corte. Con esto, ¿qué ciudadan@ de a pie va sentirse seguro en este país? ¡Qué triste!, aún más triste es que el señor presidente, que se mete hasta con la venta de garnachas en el AI Felipe Ángeles, no quisiera pronunciarse en un tema tan sensible para la ciudadanía, argumentando que él se dedica de tiempo completo a construir un mejor país para todos. Perdone usted, señor presidente, ¿un país de calidad no comienza por una limpia impartición de justicia? Y luego Gertz anda pidiendo favores a Julio Scherer Jr., quien al negarse a semejante juego sucio se ganó un fiscal enemigo, dicho por el mismo Julio Scherer. Lean por favor la carta abierta del heredero de Proceso en esta revista, no tiene desperdicio. Nada más para que vean quiénes forman parte del gabinete y de la 4T, como Olguita Sánchez Cordero y Alberto Pérez Dayán. ¡Qué vergüenza y qué miedo me dan todos! Por cierto, ya suelten a la Alcaldesa de Cuauhtémoc, otra venganza de Dolores Padierna y del Lic. “ligas”.
Escribe Guadalupe Elizalde
