Desde un Querétaro que es casi una maravilla -cuando una ve tantito para abajo-, esta familia preocupona y dada al abatimiento cuando el sufrimiento humano sale a flote y nos sentimos lejos e impotentes para consolarlos, los saluda y les desea pasen unos días de Celebración de Muertos muy tranquilos y plenos de folklore.
Y si tocamos la multiculturalidad, tenemos que señalar a Guerrero, un estado, como usted sabe, formado con trozos de los estados aledaños: Michoacán, Estado de México, Puebla y Morelos. Me falta concentrarme a fondo y estudiar cómo se repartieron estos terrenos y cuáles fueron los criterios; lo que sí conozco es cuáles etnias son, y cuántas. Si no se entienden los palestinos de buena fe y los judíos clementes con Hamas y sus gobiernos indoblegables, a ver, ponga usted de acuerdo a unos 9 grupos étnicos, o más, con diferente manera de estructurarse y de manejar sus recursos y vidas según sus usos y costumbres. Como usted ya sabe, Guerrero ocupa del deshonroso segundo lugar en pobreza y pobreza extrema, por la lejanía, particularidad y bajo desarrollo en los caminos que los comunican, sobre todo en la zona serrana, Costa Chica, Grande y Tierra Caliente.
Conforme avanzo con la redacción de este artículo, mi abuelita insiste en que incluya sus dudas, porque tiene la esperanza de que alguien “con poder” la tome en cuenta. ¡Pobre!, al menos es más optimista que yo. Pondré un guión ante de cada una de sus preguntas a ver si no termina esto en un galimatías ilegible…
- ¿Qué pasó en Coyuca de Benítez que tuvo el hampa que armar una matanza de 13 autoridades en seguridad? – ¿Quién asesinó a Bruno Placido Valerio (líder histórico de las autodefensas) y a su chofer en Chilpancingo? Creo que mi abuelita trata de sugerir que hay un nuevo grupo del hampa michoacana que trata expandirse hacia Zihuatanejo; sugiere al gobierno que blinden esta zona que aún está libre del hampa. ¿Qué van a hacer ahora con tanto tiempo sin turismo (el crimen organizado)? Y por supuesto que una se preocupa por los vendedores de cocos, la señoras y su pescado frito, sus empanadas, el aceite, las trencitas, etc., porque el 35% de los hogares en Acapulco están sostenidos por mujeres.
- ¿Ya se puso en orden a los expendedores de oro, lavadores expertos de dinero y generadores de violencia, porque son sicarios? ¿Ya se limpió la Policía Municipal de Igula? -¿En dónde estuvo metida la Policía Municipal de Acapulco durante tanto tiempo? –¿Por qué no se dividió a la Policía Nacional, Marina y Sedena en 3 grupos para atacar las consecuencias del huracán en las zonas más aisladas? Se entiende que el Puerto abona más de la mitad a la economía estatal, sin embargo la gente de ahí está emigrando; no quieren saber nada.
Me pregunta mi abuelita porqué hoy no me meto con las declaraciones de López Obrador. Le respondo que no vale la pena; es como una declaración de Fox. ¿Qué importa lo que digan si la gente en las comunidades más pobres donde ha llegado la organización de Un Kilo de Ayuda, de José Ignacio Ávalos, está transportando a sus muertos en carretillas? - ¿Por que no gastaron en habilitar las 24 antenas meteorológicas que se requieren para medir los fenómenos peligrosos como en EEUU? -¿Por qué ni la Semar ni la Sedena utilizaron sus teléfonos satelitales para comunicarse a Cdmx, como sí lo hace con sus satélites Starlink, Elon Musk? ¡México tiene dichos satélites!
Me duele lo que pregunta mi abuelita porque trasluce a un gobierno muy pequeño, ante una desgracia inmedible. Sin embargo, el hecho me hace recordar a un Estado Mexicano fuerte y frente a un gabinete organizado; vi a presidentes que se agrandaron ante la desgracias oros no), llevando el control de todo el gabinete con las riendas tensas, sin que falte por ahí alguno que se aproveche, pero esos mal nacidos, pululan.
La reconstrucción o deconstrucción de Guerrero pasa por el combate sistemático al crimen organizado que esclaviza a los más pobres cuando acapara sus insumos básicos y los vende al precio que quiere; queman los mercados para vengarse de quienes no quieren pagarles piso, asesinan a campesinos si no cultivan o trabajan para ellos, etc. ¿Los imagina usted acaparando materiales de construcción o cobrando al constructor un porcentaje porque no le compra a él la varilla o el vidrio? Todo esto estaba ocurriendo antes de Otis, ¿por qué razón no querrían seguir con sus prácticas de parásitos económicos de quienes trabajamos? Si quiere que la Navidad no sea amarga, hay que empezar por quienes roban a los más pobres y a los empresarios proactivos. Si no, todo tenderá a empeorar.
Escribe: Guadalupe Elizalde