No cabe duda que vamos de mal en peor, todo está carísimo, ya ni comer decentemente se puede, la entrada de los hijos a clases, acaba con la precaria economía de muchos padres de familia, súmele a eso, la cantidad de personas desaparecidas, crímenes, abusos de poder, grupos delictivos, robos, extorsiones, corrupción, cambios en la Nueva Escuela Mexicana, controversia sobre los libros de texto, la mañanera que parece desfile de la tercera edad y más, como decía mi madre, antes estábamos peor pero estábamos y ahora estamos peor y no estamos. Se preguntarán para que sirve este preámbulo si no escribiré sobre lo malo, lo remalo y lo que no tiene remedio con estos cambios en el sistema político mexicano, esta vez queridos lectores que leen las “Cosas que acomodan e incomodan de la maestra Lorena” hablaré de la escases de políticos, se acabaron los nombres que figuraban en el sistema político mexicano.
En la política, pareciera que los nombres de muchos hombres eran vitalicios o se rotaban los puestos, y peor aún los políticos que ya ocupaban un cargo o puesto, se dejaban perder, pues no pasaba nada, los partidos políticos de otra afiliación no tenían cartas fuertes que mandar a una elección. Antes se hablaba de Alfredo del Mazo, Miguel Ángel Osorio, Aurelio Nuño, Luis Videgaray, Felipe Calderón, Margarita Zavala, Beatriz Paredes, Alejandro Moreno, Manlio Fabio Beltrones, Roberto Madrazo, Jesús Murillo, Carlos Sansores y la lista sería interminable, militantes de los distintos partidos, había mucho de donde elegir para sacar candidatos presidenciales, Hoy en día, se solicitan políticos, ya no hay, los partidos no encuentran un gallo bueno para lanzarlo a la contienda. Aunado a esta crisis, parecen pelotas de pin pon, se cambian de partido como de calcetines de acuerdo a sus intereses, esto ha llevado a una crisis de no encontrar entre toda la horda de militantes de cualquier partido, uno, solo uno que tenga carisma, que no esté muy visto, que no tenga cola que le pisen, que sea hombre, que sea honesto, ya no pidamos que esté muy preparado académicamente porque sería pedir un milagro.
El próximo año se elegirá nuevamente como cada seis años a la persona que de acuerdo a la decisión del pueblo, será elegido Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, lo importante es que ahora se manejan los nombres de dos mujeres, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, por primera vez en la historia de nuestro país, dos mujeres pelearán la presidencia, tan así está la pobreza del partido fuerte de antaño, que tuvo que hacer alianza con PAN, PRD Y PRI, la otra, la Sheinbaum va por Morena, y hasta hoy día no se han pronunciado otros nombres ¿Será que dentro de un año podremos decir “Habemus Presidenta”?
Sí, pienso y analizo en la posibilidad ahora de que una mujer logre ganar la presidencia de México, dicen que todos los cambios son buenos, sin embargo, considero, opinión muy personal que les falta uno no sé qué, que qué sé yo que no me acaban de convencer. ¿Claudia seguirá la misma política que su antecesor, la guerra de abrazos y no balazos, repartiendo apoyos por doquier porque, primero son los pobres, o seguir acusando a los criminales con su abuelito, otros seis años con esa misma visión, está de pensarse y Xóchilt invitando a los demás a consumir el peyote porque se viaja muy bien y a pensar que por portar un traje típico mexicano ya es parte del paisaje de México, cabe aclarar, no milito en ningún partido, no tengo preferencia por ninguna de las candidatas, sin embargo, vivo en este país, quien gobierna, también lo hace conmigo, lo que pase en el país me afecta a mí, a mi familia y a todos. Por ello quiero publicar un anuncio que verse así.
Se solicita político, edad de 45 a 80 años, estado civil: indistinto, estudios: de preferencia que cuente con una carrera, titulado, con años de servicio en los cuales ha demostrado honestidad, disposición, triunfos personales, puesto: presidente de México, salario: a negociar, favor de enviar curriculum lo más pronto posible, a ver si aún logra colarse entre las candidatas a la presidencia. Enviar sus documentos a la mañanera. Gracias.
Escribe: Lorena Reséndiz Mendoza