Hoy catorce de julio de dos mil veintidós alrededor de una treintena de directores fuimos convocados a un taller de capacitación para dar una revisión al Nuevo Plan de Estudios de la Educación Básica 2022, en el marco de la Nueva Escuela Mexicana, llegamos con el cansancio de tanta burocracia que se da al cierre del ciclo escolar dos mil veintiuno dos mil veintidós, aún con las secuelas de la pandemia del Covid-19 y con la amenaza de la cuarta oleada de contagios. Con esta lápida a cuestas, también acudimos con la esperanza de conocer una nueva propuesta educativa, algo que dé sentido al trabajo a educativo, en lo personal no esperaba encontrar algo que marcara la diferencia entre un Plan de Estudios y otro más, trabajamos actualmente con dos Planes distintos y hemos logrado sobrevivir a ello.
Para empezar se nos pidió hablar de las expectativas que teníamos del taller, la mayoría de mis compañeros y compañeras docentes hablamos de la necesidad de partir de algo novedoso pero significativo y bien aterrizado, sabemos que para la Nueva Escuela Mexicana los Derechos humanos parten en este nuevo bagaje que en el espacio público democrático existen diversos sujetos de derecho: niñas, niños, adultos mayores, jóvenes, mujeres y hombres, pueblos indígenas y afroamericanos, extranjeros, migrantes, refugiados, asilados y desplazados, integrantes de la diversidad sexo- genérica, como las personas trans, intersexuales y queer , personas discapacitadas, grupos urbanos y clases sociales, esto podría redondearse a todos los habitantes del territorio nacional (Plan de Estudios de la Educación Básica 2022) También enfatiza que en el enfoque centrado en los derechos de niñas, niños y adolescentes es necesario focalizar el trabajo sobre los derechos sexuales y reproductivos, fundamentados en los derechos humanos y son el punto de partida para la construcción de una nueva ciudadanía sexual.
También enfatiza que la escuela debe formar niñas, niños y adolescentes felices, ciudadanos del mundo, enmancipados y capaces de tomar decisiones, esta palabra de enmanciparse se reitera en varios apartados. Una frase llamó mi atención, Autonomía Curricular, que en palabras del autor hace referencia a que maestras y maestros tienen la “libertad” de ejercer y reinventar la docencia, no sé qué tan real sea esta disposición, si en cada reforma educativa se representa un proyecto político- pedagógico que define los contenidos y la organización del currículo y no son los docentes quienes aportan su saberes y experiencia ni es tomado en cuenta, en los últimos cincuenta años el enfoque es instrumental, conductista y eficientista, acordada por organismos internacionales como la Organización de los Estados Americanos (OEA) la UNESCO, la OCDE, el FMI y la OMC con un giro meramente empresarial, dentro de este enfoque de la educación básica, a los docentes se les ha considerado como personal técnico que solo transmiten información, gestores educativos que planean, evalúan y motivan a sus estudiantes, anulando sus saberes, experiencias y formación profesional. De igual manera, las evaluaciones son realizadas por personas ajenas al proceso formativo, por lo tanto la calidad educativa ha quedado en un mero discurso, por ello la escuela ha quedado como un elemento más de la red de instituciones.
En otro apartado nos hace mención que los territorios más desatendidos por el Estado y la sociedad están habitados por personas en donde se expresan las principales desigualdades y exclusiones cruzadas en la forma de pobreza, explotación del medio ambiente, y entonces ¿Cuál es la solución? ¿De qué forma abatir estas condiciones? Ahora dentro de la Nueva Escuela Mexicana se incluye a las comunidades, a la salud, a la pandemia, pero iniciaremos un nuevo ciclo escolar, si la pandemia lo permite y se no hay libros, se está trabajando en ellos, quizá por ahí de diciembre estén listos, y ojalá sean suficientes, ya que al iniciar el ciclo escolar ni los libros llegan completos.
Demasiada información para un taller de dos días, y después hacerle llegar este alud de propuestas e indicaciones a los y las docentes, aún no cerramos el ciclo escolar y ya estamos bombardeados por nuevas terminologías, que no acabamos de entender, porque déjeme decirle que muchas de las palabras que aparecen escritas no son localizables en el diccionario. No quiero ser pesimista, pero no veo que tiene de extraordinario este nuevo Plan de Estudios.
¿Qué opina usted que se toma un tiempo de leer mis escritos? Quizá se quedó como yo, azorado ante tanta información y nada en concreto.
Así que bienvenidos al nuevo modelo educativo, de la Nueva Escuela Mexicana.
Escribe: Lorena Reséndiz
Para empezar se nos pidió hablar de las expectativas que teníamos del taller, la mayoría de mis compañeros y compañeras docentes hablamos de la necesidad de partir de algo novedoso pero significativo y bien aterrizado, sabemos que para la Nueva Escuela Mexicana los Derechos humanos parten en este nuevo bagaje que en el espacio público democrático existen diversos sujetos de derecho: niñas, niños, adultos mayores, jóvenes, mujeres y hombres, pueblos indígenas y afroamericanos, extranjeros, migrantes, refugiados, asilados y desplazados, integrantes de la diversidad sexo- genérica, como las personas trans, intersexuales y queer , personas discapacitadas, grupos urbanos y clases sociales, esto podría redondearse a todos los habitantes del territorio nacional (Plan de Estudios de la Educación Básica 2022) También enfatiza que en el enfoque centrado en los derechos de niñas, niños y adolescentes es necesario focalizar el trabajo sobre los derechos sexuales y reproductivos, fundamentados en los derechos humanos y son el punto de partida para la construcción de una nueva ciudadanía sexual.
También enfatiza que la escuela debe formar niñas, niños y adolescentes felices, ciudadanos del mundo, enmancipados y capaces de tomar decisiones, esta palabra de enmanciparse se reitera en varios apartados. Una frase llamó mi atención, Autonomía Curricular, que en palabras del autor hace referencia a que maestras y maestros tienen la “libertad” de ejercer y reinventar la docencia, no sé qué tan real sea esta disposición, si en cada reforma educativa se representa un proyecto político- pedagógico que define los contenidos y la organización del currículo y no son los docentes quienes aportan su saberes y experiencia ni es tomado en cuenta, en los últimos cincuenta años el enfoque es instrumental, conductista y eficientista, acordada por organismos internacionales como la Organización de los Estados Americanos (OEA) la UNESCO, la OCDE, el FMI y la OMC con un giro meramente empresarial, dentro de este enfoque de la educación básica, a los docentes se les ha considerado como personal técnico que solo transmiten información, gestores educativos que planean, evalúan y motivan a sus estudiantes, anulando sus saberes, experiencias y formación profesional. De igual manera, las evaluaciones son realizadas por personas ajenas al proceso formativo, por lo tanto la calidad educativa ha quedado en un mero discurso, por ello la escuela ha quedado como un elemento más de la red de instituciones.
En otro apartado nos hace mención que los territorios más desatendidos por el Estado y la sociedad están habitados por personas en donde se expresan las principales desigualdades y exclusiones cruzadas en la forma de pobreza, explotación del medio ambiente, y entonces ¿Cuál es la solución? ¿De qué forma abatir estas condiciones? Ahora dentro de la Nueva Escuela Mexicana se incluye a las comunidades, a la salud, a la pandemia, pero iniciaremos un nuevo ciclo escolar, si la pandemia lo permite y se no hay libros, se está trabajando en ellos, quizá por ahí de diciembre estén listos, y ojalá sean suficientes, ya que al iniciar el ciclo escolar ni los libros llegan completos.
Demasiada información para un taller de dos días, y después hacerle llegar este alud de propuestas e indicaciones a los y las docentes, aún no cerramos el ciclo escolar y ya estamos bombardeados por nuevas terminologías, que no acabamos de entender, porque déjeme decirle que muchas de las palabras que aparecen escritas no son localizables en el diccionario. No quiero ser pesimista, pero no veo que tiene de extraordinario este nuevo Plan de Estudios.
¿Qué opina usted que se toma un tiempo de leer mis escritos? Quizá se quedó como yo, azorado ante tanta información y nada en concreto.
Así que bienvenidos al nuevo modelo educativo, de la Nueva Escuela Mexicana.
Escribe: Lorena Reséndiz
