Amigo lector si usted me lo permite, hoy hablaré de un tema difícil, pero debido a todos los actos delictivos que hemos sufrido habitantes de este municipio es necesario tocarlo y más aún si lo hemos visto crecer en forma impresionante en estos últimos años y más cuando el Covid-19 ha dejado sin trabajo a cientos de familias y nuestra economía está por los suelos… Aquí le compartiré mi experiencia de cuando llegue a San Juan del Río, Qro… Hace 35 años llegué a la tierra de mis abuelos y lugar en donde nació mi amada madre Celia Barrón Zuñiga, mis raíces me hicieron decidir quedarme para siempre aquí, buscando un mejor nivel de vida y crear una familia, hoy tengo la fortuna de tener 2 hijos (hombre y mujer) y 2 nietos (niño y niña)… Llegué el 17 de diciembre de 1985 disfrutando las primeras posadas tradicionales en las calles de San Juan dejando atrás la Cdmx, y tantos recuerdos de mi infancia, proveniente de la Colonia Jardín Balbuena de la Delegación Venustiano Carranza… Después de haber prestado nuestro apoyo junto con mis hermanos Jorge Cuauhtémoc QEPD y René Temóc en el rescate y auxilio de los damnificados del sismo, además de haber atendido a cientos de familias en el Albergue del CREA en Ixtacalco mis hermanos y yo junto con varios compañeros de la brigada “JB” nos instalamos en la calle de Mariano Matamoros no.56 en el corazón de éste hermoso municipio, la casa que ocupamos la rentaba mi padre Jorge Mondragón Ramírez QEPD a mis abuelos Manuel Barrón y María Zúñiga los cuales ya fallecieron también, está casa se en contaba dividida en dos secciones en una parte vivían ellos y en la otra nosotros pero como diría mi abuelita: ¡Esa es otra historia hijito!… Le comento esto amigo lector, porque cuando nuestros compañeros de la brigada de apoyo y auxilio “JB” (que quede claro que JB no es por el whisky sino por Jardín Balbuena) conocieron San Juan del Río se enamoraron del lugar, algunos pensaron en establecerse o poner algún negocio por estas tierras, siempre mencionando la tranquilidad y paz qué se respira “Según ellos en mi rancho”… Pero el único que se quedó y echo raíces fui yo… ¡Cómo no hacerlo! “SI ES LA TIERRA DE MI MADRE, LA CUAL HOY ES TIERRA DE MIS HIJOS Y DE MIS NIETOS”… Lugar en donde uno podía caminar a muy altas horas de la noche sin ningún riesgo, sin ningún peligro, lugar en donde pocas veces se escuchaban actos de violencia, robos, lugar a donde no se sabía de secuestros o asaltos a mano armada, lugar en donde muchos de los que llegamos después del TERREMOTO del 85 provocó que creciera de forma inesperada San Juan… ES AQUÍ A DONDE MILES DE PERSONAS SE ESTABLECIERON Y EMPEZARON A ECHAR RAÍCES ENCONTRANDO UN LUGAR ADECUADO PARA SU DESARROLLO, BUSCANDO ALTERNATIVAS LABORARES, CON NUEVAS OPORTUNIDADES PARA LA FORMACIÓN Y EDUCACIÓN DE SUS HIJOS… Es aquí también, en donde se empezaron a poblar la zona oriente, creciendo colonias, abrirse negocios, estableciéndose industrias en pocas palabras amigo mío; San Juan empezó a crecer y también consigo empezaron haber manchas urbanas por todos lados, problemas de transporte como en todas las ciudades, también de agua, drenaje, pavimentación, electrificación y de tantas cosas que usted como yo lo hemos vivido, sufrido y visto en 35 años… Pero aún con todo esto, no existían tantas situaciones de delincuencia, asaltos, robos a casa habitación, robos de vehículos, secuestros, asesinatos y tantas cosas que hoy aunque nos digan que estamos viviendo en el estado más tranquilo del país, ¡Ya nos quitó el sueño!… Personas muy cercanas han vivido en carne propia el robo a su casa, robo de vehículo, desaparición de algún familiar, asalto a mano armada, incluso nosotros como familia Barrón hemos perdido a dos familiares por asesinato que hasta la fecha no sea esclarecido, entre tantos actos aberrantes de violencia… Todos podríamos señalar responsables de tales actos como; al gobierno en turno, a la delincuencia organizada, a la falta de policías, a los malos gobernantes de los partidos políticos, al vecino, al conocido, al vicioso, al Covid-19, a la marginación, al crecimiento demográfico, a la falta de empleo así como a la situación económica y a tantos problemas que podemos enunciar y no acabaríamos para buscar culpables… Y ¿Sabe qué amigo lector? ¡No se trata de eso!… Es el momento que nos cuidemos unos de otros, es momento que vigilemos más con quien se juntan nuestros hijos, además el Covid-19 está cobrando muchas vidas, es momento de organizarnos con nuestros vecinos para formar brigadas de apoyo y auxilio, es momento que usted como yo nos empecemos a preocupar más por el lugar en donde queremos terminar el resto de nuestros días, es el momento de exigir y sumarnos para buscar respuestas adecuadas para parar estos actos delictivos… Estoy seguro amigo mío, que para las elecciones del 2021, estará en boca de todos y cada uno de los aspirantes a gobernar nuestro municipio este tema, algunos con propuestas solidas, otros con sueños guajiros, algunos más tratando de enderezar el rumbo, pero todos con el mismo propósito darle a la población una mayor esperanza de seguridad, salud, economía y crecimiento… Eso es lo que esperamos de quiénes gobernarán en el 2021, dar soluciones e involucrarnos todos por el bienestar de todos, esperemos también que los ciudadanos seamos más responsables y conscientes que la vida no retoña y el Covid-19 está en números al rojo vivo, pareciera que no pasa nada y siguen muriendo personas muy cercanas, así que no bajemos la guardia y usemos cubre-bocas, gel antibactetial, caretas, toallas desinfectantes y sigamos todas las indicaciones del sector salud, es momento de reflexionar si queremos vivir o morir por nuestra irresponsabilidad… ¿No cree Usted amigo lector?…
