“En la tierra del señor, hasta el más santo peca” #ElDragónDeMondragón

Estimado lector, si Usted me lo permite hoy hablaremos de algo que no parece ser una acción de un representante divino y cómo diría mi abuelita hijito: “Aveces los lobos se presentan con piel de ovejas” los demonios salen a la luz pública, todo hombre santo también tiene demonios e incluso secretos y cuando menos lo espera los muestra de diferentes maneras… Recuerda qué nadie es lo suficientemente “Santo o limpio para no ser tocado por la mano del demonio y su perversión”… Me quede perplejo de lo sucedido cómo miles de personas así que me permití utilizar parte de lo que escribió Gerry Boy en su plataforma de miles de seguidores su texto le da al clavo y me queda cómo anillo al dedo dice lo siguiente: “Vaya con el escándalo del Dalai Lama que aunque se disculpó tras el vídeo viral besando a un niño dijo según él; “Fue una manera inocente y juguetona”
El menor se acercó al Dalai Lama y le preguntó si le podía abrazar, por lo que el líder le invitó a subir al escenario, le mostró su mejilla, y le invitó a darle un beso: “Primero aquí”.
Tras ello, el Dalai Lama le comentó, enseñándole la boca, “entonces creo que finalmente aquí también”. Para besarlo, tiró de su barbilla, y posteriormente le enseñó la lengua y le dijo: “Y chúpame la lengua” El joven se resistió.
Cómo he sostenido durante tanto tiempo ninguna religión ni mucho menos los líderes de las mismas son confiables al final son hombres de carne y hueso que sufren de la condición humana.
Otra raya más al tigre… ¿Cómo le quedó el ojo amigo lector? ¡Seguramente cuadrado!… Con lo sucedido: el mudo habló, el ciego observó y el sordo escuchó lo que muchos han callado hoy sale con un acto reprobable y nos damos cuenta que en todos lados se cuecen habas… Por lo cuál, es mejor poner la otra mejilla, antes de lanzar la piedra, sólo recordemos quién escupe hacia arriba, seguro le cae el gargajo en la cara… Es mejor ser ¡un buen ser humano! que un devoto de vendas y cadenas originadas por el fanatismo clerical… ¿No cree usted amigo lector?…
Escribe: Carlos Tizoc Mondragón Barrón